El Ayuntamiento restaura la talla procesional del Cristo del Misterio del Paso Morado de Lorca
Se trata de una escultura religiosa de tamaño real, obra del escultor Manuel Juan Carrillo, tallada en madera de pino y policromada con óleos, que representa la imagen de un Cristo crucificado
Los trabajos se han centrado en consolidar y sellar las grietas y fendas; así como en la eliminación de suciedades, repintes y capas de barniz oxidado, llevando a cabo un tratamiento final con el objetivo de mejorar su conservación
Procesiona desde el año 1945 el Viernes Santo en el grupo escultórico del Calvario junto a las imágenes de San Juan, María Magdalena y la Santa Mujer Verónica
Fulgencio Gil, alcalde de Lorca: “Los profesionales del Taller Municipal de Restauración están dejando un auténtico legado en la ciudad, ya que están contribuyendo a enriquecer el patrimonio cultural y a recuperar piezas que precisaban atención”
14 de marzo de 2024. El Santísimo Cristo del Misterio, del Paso Morado, ha regresado en la mañana de este jueves a su altar en la Iglesia de Nuestra Señora del Carmen tras ser sometido a un proceso de rehabilitación en el Taller Municipal de Restauración, dependiente de la concejalía de Desarrollo Local. Se trata de un trabajo que ha estado dirigido por el restaurador, escultor y profesor Antonio García Rico.
El alcalde de Lorca, Fulgencio Gil Jódar, ha resaltado, en la entrega de esta obra restaurada al Paso Morado, la importancia de esta pieza dentro del patrimonio que atesora la Cofradía del Santísimo Cristo del Perdón, “al tratarse de una talla que procesiona desde el año 1945 en el Desfile Bíblico Pasional del Viernes Santo en el grupo escultórico del Calvario junto a las imágenes de San Juan, María Magdalena y la Santa Mujer Verónica”.
Se trata de una escultura religiosa de tamaño real, tallada en madera de pino y policromada con óleos, que representa la imagen de un Cristo crucificado. Es obra del escultor ciezano Manuel Juan Carrillo Marco, un imaginero que fue el máximo exponente del arte religioso de su ciudad natal y que realizó numerosas imágenes, grupos escultóricos y tronos para los desfiles de Semana Santa de toda la Región de Murcia y Albacete.
En su estado inicial, la escultura mostraba perdidas de volúmenes por fractura o abrasión en manos y zonas expuestas, suciedad generalizada y depósitos de secreciones de insectos e infección de xilófagos. Además, presentaba fracturas estructurales y desprendimientos de aparejos de sustrato, barnices oxidados y mal aplicados, repintes e intervenciones inapropiadas, así como perdidas de superficies con policromías originales y de estucos. Asimismo, la cruz había sido modificada y tratada con pinturas inapropiadas de esmalte color marrón chocolate.
Gil Jódar ha explicado que los criterios de intervención se han fijado basándose en la mínima intervención, la inocuidad de las actuaciones para los elementos originales, la diferenciación de volúmenes o policromías añadidas y su reversibilidad, partiendo siempre de un conocimiento histórico, material y patológico inicial.
El estado de conservación de la imagen era deficiente, por lo que, según el informe técnico, se ha realizado una intervención garantizando su correcta conservación y su adecuada preservación cultural. “Los trabajos se han centrado principalmente en consolidar y sellar las grietas y fendas; así como en la eliminación de suciedades, repintes y capas de barniz oxidado, llevando a cabo un tratamiento final que ha consistido en la aplicación de un barnizado de protección para matizar los brillos, estable a la oxidación y a los rayos ultravioleta, con el objetivo de mejorar su conservación y evitar posibles destellos cuando la pieza posesione con luz artificial. Además, en la cruz se ha eliminado la pintura de esmalte marrón que enmascaraba la madera, tratándola para su terminación con ceras bruñidas”, ha detallado el Primer edil.
Fulgencio Gil ha destacado la labor del Taller Municipal de Restauración, que “es un referente a nivel regional gracias a sus instalaciones y la profesionalidad de sus técnicos, que están dejando un auténtico legado en la ciudad, ya que están contribuyendo a enriquecer el patrimonio cultural lorquino y a recuperar piezas que precisaban atención”. Y ha puesto en relieve el trabajo que el restaurador Antonio García Rico ha llevado a cabo durante tres meses para restaurar la talla del Cristo del Misterio, “recuperando todo su esplendor para que pueda ser admirada por lorquinos y turistas que cada año visitan Lorca para disfrutar de la belleza y la originalidad de nuestra Semana Santa”.
Cabe recordad que la imagen de la Virgen de la Piedad del Paso Morado, la restauración del ángel del antiguo trono de la Virgen de los Dolores y de los dos ángeles del columbario del Paso Azul, así como las imágenes de San Juan Evangelista y la Santa Mujer Verónica y el grupo escultórico de la Oración en el Huerto del Paso Blanco, son algunas de las esculturas religiosas de las cofradías de Semana Santa que la concejalía de Desarrollo Local ha restaurado en los últimos años.
Grupo escultórico del Calvario, Paso Morado
El grupo escultórico del Calvario, propiedad de la Cofradía del Santísimo Cristo del Perdón, Paso Morado, tiene su precedente en el grupo del Calvario realizado a principios del siglo XVIII, para la ermita del Monte Calvario de Lorca, por el escultor francés afincado en Murcia Nicolás de Bussy, nacido en Estrasburgo a mitad del siglo XVII y que murió en Valencia en 1706. Fue destruido en la Guerra Civil.–